Estoy buenísima.
Eso es lo que pone en el informe de mi revisión anual del gine. Ya lo sospechaba pero siempre gusta recibir un documento que lo confirme.
Lo que no me ha gustado tanto es el apartado exploración en el que dice: "mamas pequeñas y simétricas" ya se que tengo las tetas pequeñas, no hace falta que me lo recuerden.
Como les gusta hacer sangre...
Por herencia familiar siempre pensaba que al crecer tendría un buen par de pechotes, ya que todas las mujeres de mi familia, desde las más ancianas hasta las más jóvenes, son tetonas. ¿Seré hija del butanero?
Mi madre siempre me dice "Yo de jovencita tampoco tenia pecho, ya te crecerá"
¿Ya me crecerá? ¿¿¿cuándo??? tengo 31 años, ya no soy jovencita y lo que no hay ya no va a aparecer, como mucho irá en descenso empujado por la ley de la gravedad.
Alguna vez he pensado en operarme pero creo que psicológicamente no estoy preparada para aceptar un elemento extraño en mi cuerpo y por otra parte, si pudiera gastarme 3000€ de golpe preferiría utilizarlos para viajar a China o algo así.
Con esto no digo que esté contra la cirugía, todo lo contrario, me parece perfecto que la gente invierta dinero en mejorar su cuerpo y la mayoría de los resultados son muy satisfactorios, pero creo que no me sentiría a gusto con unas bubis falsas. Yo lo que quiero es levantarme una mañana y tachaaan... ¡pechotes de escándalo! pero claro, milagros de estos no ocurren, que le vamos a hacer.
Una vez vi un documental sobre un experimento de aumento a través de una especie de aparato de succión, lo probaba una oriental desesperada por aumentar el tamaño de sus pechos con escasos resultados (supongo que con lo que le pagaron por salir en la tele haciendo el ridículo corrió a una clínica a ponerse unas prótesis XXL).
La verdad es envidio a las tetonas y me molaría tener un buen escote, de estos que dan sensación de buenorra poderosa, que apoyas las copas y no se te caen y si te pones palabra de honor parece que rebosas, pero no, yo soy más rollo Keira Knightley, no se puede tener todo.
Por otra parte, haciendo apología de los pechos pequeños diré que me resultan muy elegantes. Cuando me pongo un escote no me veo buenorra pero me veo elegante. Nunca tengo problemas para encontrar sujetadores bonitos, ni para dormir boca abajo. Cuando salgo a correr no necesito un sujetador especial, nunca me duele la espalda, me valen todas las camisetas y me saco las tetas en la playa sin ninguna vergüenza (total, las playas están llenas de pechotes poderosos, nadie va a mirar los míos).
Conclusión, tengo más tripa que tetas, pero lo dicho, estoy buenísima.